Dejémonos guiar por el Espíritu para superar las adversidades
Toda adversidad que nos llega trae una lección para madurar y crecer. Pero solo desde la humildad de la fe lo entendemos y vivimos debidamente: la negación de uno mismo es siempre principio de libertad interior, de paz y alegría nuevas. (P.M.)
No hay comentarios:
Publicar un comentario