Caminar en la presencia de Dios
¿Hay imagen más graciosa que la del niño consiguiendo caminar ya solo, entre tambaleos? Pero no está solo, no; una presencia vigilante le sostiene. Dios nos librará de la "angustia de la soledad" si decidimos vivir en su presencia. (P.M.)
No hay comentarios:
Publicar un comentario